Pranayama. La respiración.

Dentro de la práctica de Yoga, el Pranayama es uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta, tanto como práctica aislada dentro de una clase como en el transcurso de la misma.

Podríamos definir Pranayama como el conjunto de técnicas que sirven para controla, generar, almacenar y dirigir el Prana. Prana como energía vital existente en cada ser vivo.

Hay diferentes órganos de absorción del Prana (cornetes nasales, alvéolos, piel, lengua).

El trabajo más conocido para absorber, generar y dirigir el Prana es a través de los ejercicios de respiración.

Hay técnicas estimulantes (Kapalabati), equilibrantes (Anuloma Viloma), estabilizantes (respiración cuadrada) y expansivas (Ujjaji).

La respiración en las clases de Yoga, en la medida de lo posible se realiza a través de las fosas nasales, inhalación y exhalación.

“Con la nariz se respira y con la boca se come…” Patrick Mc Keown- El Poder del Oxígeno

Respirar por la nariz tiene múltiples beneficios. Además de los más conocidos (humedecer el aire, calentar y filtrar de partículas nocivas que llegan a nuestros pulmones) existen otros dos muy importantes para nuestro organismo a los que no se les presta tanta atención:

– Nuestras fosas y senos nasales producen Oxido Nítrico, que se añade al aire que respiramos y es el responsable de hacer más permeables y flexibles nuestros vasos sanguíneos. Esto nos lleva a un menor riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebro-vasculares, tiene efectos antimicrobianos y antibacterianos y facilita los mecanismos de neurotransmisión.

– Al imponer más resistencia al paso del aire favorecemos una mayor presencia de CO2 en sangre y así conseguimos un mayor aprovechamiento del oxigeno durante la respiración celular.

En el texto del siglo XV Hatha Yoga Pradipika ya se hace mención a Bhramari Pranayama, una técnica de respiración en la que se hace vibrar el aire en la zona de las fosas y senos nasales generando un sonido parecido al del zumbido de una abeja, favoreciendo la liberación de Oxido Nítrico en el aire que respiramos.

Algunos estilos de Yoga el Pranayama se incorpora bien al principio de la clase o al final de la secuencia de asanas, después de la relajación y previo a la meditación.

Otros, no realizan prácticas de Pranayama independiente, si no que durante la misma práctica de asanas utilizan la respiración expansiva Ujjaji. Este Pranayama consiste en el cierre parcial de la glotis, tanto durante la inhalación como la exhalación, de manera que se emite un sonido característico además de una ralentización del ritmo respiratorio.

Desde la antigüedad se reconoció el inmenso poder de la respiración sobre los estados mentales, basado en la propia experiencia de los practicantes; hoy en día ya hay estudios científicos que demuestran esta relación y como el patrón respiratorio influye en los sistemas de memoria, atención y de expresión emocional.

En el siguiente enlace, podréis entender un poco más sobre el funcionamiento del cerebro y la respiración:

Ahora haz una práctica sencilla: párate…….. cierra los ojos…….. toma una inhalación profunda y exhala el aire por la boca a modo de suspiro…….. deja que tu respiración suceda de manera natural…….. observa hasta donde eres capaz de tomar el aire……..cuanta profundidad tiene tu respiración?…….. cuenta los segundos que dura cada fase de la respiración…….. inhala 1,2,3.4,……..exhala 1,2.3,4,……. repite varias veces……. ¿Qué ha sucedido en ti?

Escribe en los comentarios tu experiencia.